El uso de los capullos de seda ha sido durante siglos uno de los secretos mejor guardados de las geishas, símbolo de belleza y admiradas en todo el mundo por lucir siempre una piel perfecta gracias a los cuidados y rituales de belleza que llevaban a cabo. Las propiedades naturales como exfoliante de los capullos de seda son:
Sericina: Con propiedades hidratantes y con más de una veintena de aminoácidos, antioxidantes naturales. Esta proteína se disuelve en el agua caliente y aporta un cuidado reparador de la piel. Los poros se purifican y el grano de la piel se afina con el tiempo.
Fibroina: Proteína que constituye la fibra de la seda, tiene propiedades exfoliantes, a la vez que es suave para la piel. Su estructura rugosa es ligeramente abrasiva, por lo que limpia en profundidad, absorbiendo las impurezas y eliminando la piel muerta.
La aplicación de estas dos proteínas en estado puro, directamente sobre la piel, nos permite beneficiarnos de uno de los cuidados faciales más lujosos que nos ofrece la naturaleza.
El uso regular de los capullos de seda como suave exfoliante, ayuda a promover la activación del metabolismo de la piel, nutrirla y dejarla cómoda, flexible y brillante.
El mejor complemento a tu ritual de belleza, para tu cuidado facial, para limpiar y para exfoliar. Puede hacer que tu piel se vuelva más suave, hidratarla y eliminar manchas oscuras, así como también ayudar a cicatrizar.
Lo puedes usar como exfoliante una o dos veces por semana, para tu limpieza diaria o para hacer tónico para tu piel y pelo.
Pasos de la técnica asiática de los Capullos de Seda:
1. Limpia tu piel como lo haces habitualmente.
2. Remoja el capullo de seda en agua tibia por 3 a 4 minutos.
3. Coloque tu dedo dentro del capullo y masajea tu rostro con movimientos circulares, especialmente por zonas conflictivas.
4. Enjuaga tu cara con agua y aplica tu tónico de siempre o crema hidratante, si lo deseas.
5. Después de usarlos, lava el capullo con agua y deja secar para reutilizarlo, cada capullo puede reutilizarse hasta 5 veces.
También puedes hacer tu propio Tónico o Agua de Capullo de Seda, en dos tazas de agua hervir por 15-20 minutos, separar y refrigerar el agua, para aplicar con rociador en las mañanas y noches, en tu cara, cuerpo y pelo.